Hacer un viaje es sorprenderse. Conocer lugares nuevos, distantes y únicos nos transforma la vida, mucho más todavía si conocemos la historia y cultura que está detrás de cada uno de esos singulares espacios. En este ciclo de conferencias de Lo Matta Cultural viajamos a Etiopía, Italia y Noruega para recorrer lugares de otro mundo, esos que contienen fascinantes y enigmáticas construcciones que no podríamos siquiera imaginar y que son monumentos al ingenio y creatividad del ser humano, concebidos hace muchos siglos con una estética y técnica que todavía nos sorprende.
En el mes de agosto y ante más de 100 personas, José Manuel Cerda dictó 3 conferencias sobre lugares de otro mundo aquí disponibles:
Lalibela. Una Jerusalén esculpida en África.
En la Tercera Cruzada, el gran general Saladino conquistó Jerusalén para los musulmanes y muchos cristianos debieron abandonar la Ciudad Santa. Entre ellos se encontraba Gebre Meskel Lalibela, un rey etíope que regresó a su natal África para llevar a cabo una misión que le había encomendado Dios: recrear en las montañas de Etiopía una copia de la ciudad de Jerusalén. Hasta el día de hoy es difícil explicar cómo pudieron esculpir estas espectaculares iglesias hace más de 800 años en una historia fascinante y legendaria que incluye a los Templarios. Este Patrimonio de la Humanidad es poco conocido y sin embargo mucho más impresionante que construcciones monolíticas más turísticas como Petra en Jordania.
Monreale. Las culturas del Mediterráneo en armonía.
Los normandos conquistaron el emirato árabe de Sicilia hace mil años y, en vez de expulsar a los musulmanes y destruir el mosaico cultural que existía en esta isla del Mediterráneo, decidieron integrar lo mejor del arte y la intelectualidad bizantina, judía, árabe y latina para crear una de las cortes mas fabulosas de Europa como fue la del rey Rogelio II. Uno de sus nietos mandó a construir en el “Monte de los Reyes” una de las catedrales más impresionantes de la Edad Media: un maravilloso festival de colores y figuras doradas que todavía impactan a los visitantes. Es Patrimonio de la Humanidad en conjunto con otros edificios normandos de Sicilia.
Borgund. El cristianismo nórdico hecho madera.
Entre bosques milenarios y fiordos boreales encontramos una iglesia de madera que se alza como un testimonio de la cristianización de los vikingos y que demuestra un sincretismo cultural que integra la nueva religión con la ancestral mitología nórdica. En esos fríos parajes, la iglesia de Borgund fue un refugio y lugar de encuentro para la comunidad durante siglos, y ha sido inspiración arquitectónica para edificios en todo el mundo. Con sus tallados de dragón y techos escalonados con tejuelas, Borgund es el mejor ejemplo de las muchas iglesias de madera que se construyeron en la Noruega medieval y es Patrimonio de la Humanidad.